Ni tuyo, ni mía

Roberto y Amanda son una pareja que lo tienen todo. Con una hija en el extranjero y la vida prácticamente resuelta. De camino al trabajo, Roberto ve a una bailarina que le llama la atención. Mientras que Amanda todos los días batalla con la música estridente de una persona que parece mas un vagabundo que un músico. Roberto habla con Lía y empieza a salir con ella. Cuando es el aniversario de Roberto y Amanda, a Roberto se le olvida y le cancela a su esposa para ver a Lía.  Amanda lo busca y lo encuentra saliendo con alguien. Amanda sigue a su marido y así se da cuenta que su esposo esta saliendo con la pareja del músico. Al día siguiente habla con el músico, Diego, para que se vaya con su novia lejos de la ciudad. Diego, incrédulo de lo que le dice Amanda se sorprende cuando confirma que lo que le dice Amanda es verdad. Roberto y Lía tienen una aventura.

¡No mames, qué! Fue mi expresión al ver la película. No se si hay una manera de contarla sin arruinar la trama para las personas que aun no la han visto, pero tratare. Resulta ser una cinta con una historia poco convencional. Mientras que muchas películas se centran en evidenciar la infidelidad mostrando sus consecuencias o la pasión resultante de esta, aquí toma un camino extraño. Un camino quizá un poco para mentes abiertas. Lo que si puedo adelantar es que los personajes de Amanda y Diego unen fuerzas para recuperar a sus respectivas parejas. Desde ahí ya podemos ver la calidad de la historia porque bien pudieron unirse para destruirlos o para hacerse amantes y pagarles con la misma moneda, pero no. Y aquí ya empezamos a verla con mas detenimiento, con mas análisis, con mas sorpresa. Al final podemos verla desde el punto de vista religioso, de la moral, de la libertad, pero lo que sí es seguro es que no deja indiferente. Interesante y sorprendente que sea una película mexicana.

Calificación: 9.5